El reglamento condiciona la dinámica del juego y por lo tanto, la técnica y la táctica. Las reglas del juego podríamos considerarlas como el punto de partida de los esquemas tácticos y estratégicos, ya que nos indican el qué se puede hacer y lo que no está permitido, aunque muchas veces hay circunstancias que nos harán optar por una u otra táctica a seguir durante todo el encuentro o cambiarla en cierto periodo concreto del encuentro.
Es por ello, que un gol al inicio de un encuentro, un jugador vital expulsado, una acumulación de faltas en un tiempo breve, llevar un amplio resultado en menos de lo esperado, etc., son, entre otras muchas condiciones reglamentarias, situaciones que nos darán pie a reflexionar sobre que sistemas y procedimientos tácticos deberemos emplear "in situ" y sin mucha pérdida de tiempo, algunos entrenadores lo llaman "leer el partido". Por lo tanto, es necesaria la capacidad de observación del entrenador y la rápida decisión de cambio de táctica, estratégia, etc.
